Entresijos del Penya - Granada

Mal Rollo en Badalona

Debido a la increíble, inaudita e inusual racha de Arxi en la que ha conseguido estar mas de 2 partidos seguidos sin lesionarse, decidimos enviar a unos reporteros nuestros a cubrir el partido que el domingo pasado disputó el Joventut contra el Cébé Granà.
Y que fue lo que pasó?
Pues que si es verdad, que Arxi sigue sin lesionarse (toquemos madera) nos encontramos con una serie de episodios que nos hicieron ver el mal rollo que se respira en Badalona y que tiene a los componentes del equipo verdinegro como protagonistas de este hecho.
Ya nos habíamos percatado en la rueda de calentamiento de que algo no funcionaba del todo correctamente, pero la situación estalló en un momento en que en una jugada de ataque, Barton tenía la bola y mandó a Rudy a cortar por la zona y a ponerse en el otro lado de en donde estaba para recibir.
Hasta aquí no hubo ningún problema, Rudy cortó y se dirigió a la zona que le indicaba su compañero checo.
Pero justamente cuando pasó por delante de la puerta de acceso a los vestuarios, entró por la misma y en dirección al banquillo, Drew Sullivan que en aquellos instantes regresaba a la pista después de haber estado buscando fuera del pabellón en la "Plaça del President Ciutadans de Catalunya Ja soc Aquí" los minutos de juego que dice haber perdido y que merece, se dejó la susodicha puerta abierta.
En aquel momento, y proveniente de la puerta de vestuarios, una gran corriente de aire sacudió el Olímpico.
Nuestros reporteros gráficos que estaban atentos, tomaron esta instantánea que muestra la magnitud de la corriente que sacudió la cancha del Olímpic.:



Automáticamente y como si el demonio le poseyera, Rudy se volvió sobre sus pasos y ocupó nuevamente la posición que tenía antes de que Barton le mandara cortar.
Barton extrañado, le insistió: “Rudy que te he dicho que te vayas pal otro lado, hombre…..”
A lo que Rudy con un mosqueo del mil pares, le replicó: “Si Hombre!!!, o sea, que te crees que voy a volver al otro lado o sea que con el aire que entra o sea me despeine y se me quite o sea la ensaimada estilo enbiei que con tanto cariño o sea me colocó el Llongueras o sea en la cabeza y que tanta pasta o seas me costó.”
Barton haciendo acopio de paciencia le insistió: “Rudy por Aíto García Reneses (o sea por Dios) , haz el favor de cortar y colocarte en el otro lado”
Rudy sumamente cabreado le insistió: “O sea Que no voy a ir o sea al otro lado o sea , que hay corriente y me despeino o sea , si quieres que vaya o sea, dile al Sullivan que deje de buscar los minutos de juego que dice haber perdido o sea y dile que cierre la puerta de una pvta vez o sea ”
Barton ya un poco alterado le propuso una solución: “Mira Rudy, hacemos una cosa, tu cortas, yo te paso la pelota, yo voy a buscar mi coche y me dirijo con él hacia la puerta abierta de vestuarios y la cierro”
Rudy en una de sus típicas pataletas se puso farruco (que no Farruquito, eh!!!!): “Que no, que no, y que no, o sea ahora ya me he enfadado hombre!!!!, o sea yo no me muevo de aquí o sea hasta que hayáis cerrado esta puerta o sea, y ya no sople aire o sea y no me despeine, además o sea ahora ya no soy tu amigo o sea que ya no me junto contigo o sea”
Visto el cariz que tomaba la cosa y sabiendo lo impertinente que se pone el Rodolfito cuando se cabrea, le pasó, o mejor dicho, le tiró la pelota con un poco de mala leche y se dirigió hacia el banquillo para coger las llaves de su nuevo y flamante utilitario con el que dirigirse hacia la maldita puerta y poder cerrarla.
En el banquillo, y al quite de sus compañeros como siempre y para poder ayudarles, estaba Laviña, viendo que la cosa no funcionaba sacó su bazoca del bolsillo y apuntó hacia la puñetera puerta con la intención de sellarla y que dejara de entrar aire de una jodida vez.
Pero haciendo gala de la puntería que le acompaña últimamente desde la larga distancia, su tiró se desvió un poquito y en lugar de impactar contra la puerta de vestuarios impactó contra el tejado del Pabellón Olímpic, haciendo en él un boquete de dimensiones considerables.
Eso si, se cargó las ràfecs contrarios del tejado y les dejó secos, listos y sin anotar un solo punto.
Por cierto, del mosqueó por fallar , se cargó una pobre silla en la que había puesto sus honorables posaderas tiempo à y mas tiempo del deseable , el mítico Bodiroga cuando visitó el Olímpic con la Roma
Como la cosa se complicaba en exceso, Bob que estaba con cara de somines, de circunstancias y de que la cosa no fuera con él, en el banquillo , se levantó tranquila y pausadamente y para intentar ayudar, y ser como mínimo un poco de utilidad en el equipo, decidió ir con toda rapidez a cerrar la puerta.
Empezó a correr desde el banquillo en dirección al túnel de vestuarios, pero tardó 23 horas y 12 minutos en llegar, tiempo en el cual Gaines se negó a salir a pista, no fuera a ser que la corriente de aire se llevara alguno de los tatuajes de su body por lo que casi no jugó en todo el partido.
Viendo que Bob se apresuraba a arreglar el desaguisado, Petts que estaba en pista en aquel momento decidió irse ofendido al banquillo y en cuanto se cruzó con Aíto le soltó: “Esto ya es el colmo, hombre, estoy indignado contigo, no solo haces jugar mas a Arxi para que me quite la titularidad, sino que encima cuando hay que resolver un grave e importante problema mandas a Bob para que lo haga y a mí me discriminas totalmente. Esto no es justo, estoy marginado, estoy cabreado y no pienso seguir apuntando un trato tan descriminatorio por mucho tiempo mas”
Aito imperturbable le espetó: “O te callas o te dejo sin recreo en Zagreb”
Y Petts siguió murmurando y rezando el rosario según acreditos topos pudieron oir.
Como la maldita puerta seguía abierta, la corriente de aire seguía meciendo la larga cabellera de Marcelino al viento, que en medio de tanto desbarajuste se puso a menear las caderas y los brazos y a cantar: “Aire, ah, ah, ah, soy como el aire ah, ah, ah, pegado a ti” dirigiéndose ipso facto hacía la primera fila de la grada, en donde invitó a un par de muchachas de muy buen ver a bailar con él.
Desde la zona de acompañantes, la Cañada, o era su amiga?, o era la amiga de su amiga?, o era otra? ni se inmutaba. Ya sabía por propia experiencia como la gastan algunos brasileiros díscolos.
Tanto se entusiasmó con el baile y el ritmo el Caipirinhas, que no se dio ni cuenta , absorto en sus historias, de que finalizaban los 24 segundos de posesión, y en el último segundo lanzó una pedrada contra el tablero, que lo hizo añicos e hirió a cuatro espectadores de la graderia superior que se habían colado sin entrada
Debido al viento, Ricky estornudó en la silla de cambios, “Atchis!!!!!,Atchis!!!!! y Atchis!!!!!!vaya ya he vuelto a pillar otra gripe. El otro día en la "guarde" pillé la escarlatina, la varicela y cogí acetona. Bueno, mi papaito me dice que al menos así seguiré creciendo”
Benito para no volver a tener tortícolis se enroscó en la cabeza una boina de estas negras con rabillo y todo, y la verdad es que de lejos no parecía ni que la llevara puesta.
Harto de tantas tonterías y viendo que hoy los triples como que no tocaban, Paco dejó la pista y se encaminó hacia la puerta. Cogió el pomo y la cerró sin mas. El aire se aplacó y Rudy viendo que su bisoñé ya no corría peligro, en menos de un minuto, trincó un rebote por encima de unas brochetas , anotó dos tiros libres, robó dos pelotas e hizo dos mates. En el último robo de peloSito, esta última iba repitiendo mientas botaba contra el suelo: “por supuesto que Aíto tiene razón, por supuesto que Aíto tiene razón y Petts se queda sin recreo en Zagreb”
Acabó felizmente el partido, Rudy y Barton se volvieron a hacer amigos y se abrazaron sobre la pista, el mallorquín incluso le dijo que le regalaría una sobrassada que se había traído de su pueblo para que el checo la utilizara como combustible liquido para los viajes que tuviera que realizar en coche, off course, en un futuro desde la cancha hasta alguna de las puertas del viejo Olímpic.
Cuando accedieron al vestuario vieron el origen de la corriente de aire: Encima de la camilla de masaje, Demetrio completamente sobado como un tronco, roncaba emulando al famoso Pepepotamo y su ya universal super-soplido-huracanado, lo único que en este caso era un Super-Ronquido-Huracanado.
Al despertar por el jolgorio de la victoria , preguntó sobresaltado y con los ojos pegados de legañas: A que hora es el partido contra el Granada?????
Sus compañeros se deseperaron tanto con él, que le cortaron las…………………………….....
greñas.
Por cierto, y esta es la noticia verdaderamente importante: Arxi tampoco se lesionó, ni se resintió de sus molestias ni nà de nà.
Seguiremos mandando reporteros para cubrir este insólito acontecimiento.

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